EuroVerify Auto

Qué aparatos utilizamos.

En cada revisión utilizamos instrumental profesional de diagnóstico para asegurarnos de que no se nos escape ningún detalle. Estos aparatos nos permiten detectar fallos ocultos, confirmar el estado real del vehículo y ofrecerte un informe técnico de máxima fiabilidad.

Diagnosis electrónica:

Conectamos el vehículo a una herramienta de diagnóstico para detectar fallos electrónicos, errores ocultos y verificar el estado de los sistemas clave.

Espesímetro:

Medimos el grosor de la pintura para detectar repintados, reparaciones no declaradas o daños estructurales ocultos.

Higrómetro:

Utilizado para detectar humedad en zonas críticas del vehículo, especialmente en autocaravanas o coches con posibles filtraciones.

Calibre eléctrico (multímetro digital):

Utilizamos este instrumento de precisión para medir el grosor real de los discos de freno y comprobar si están dentro de los límites recomendados por el fabricante. Detectamos desgaste excesivo o irregular, lo que es fundamental para evaluar la seguridad del sistema de frenado.

Prueba de culata:

Realizamos un test químico para detectar posibles fugas internas o fallos en la junta de culata, algo crítico en motores usados.

Analizador de gases de escape:

Verificamos que el motor cumpla con los valores de emisión correctos y no tenga problemas internos como combustión incompleta o exceso de humo, y asegurarnos que cumple con las emisiones que el vehículo homologa.

Cámara termográfica:

Permite identificar puntos de sobrecalentamiento en el motor, frenos o sistema eléctrico, que podrían indicar fallos ocultos.

Tester liquido de frenos:

Utilizamos un medidor específico que analiza el punto de ebullición del líquido de frenos, indicando si ha absorbido humedad y ha perdido eficacia. Un componente esencial para tu seguridad en carretera.

Cámara endoscópica:

Nos permite inspeccionar zonas internas del motor, conductos o partes de difícil acceso sin necesidad de desmontar. Ideal para detectar fugas, acumulación de carbonilla, óxidos o daños ocultos. Una herramienta clave para revisiones profundas y no invasivas.

Refractómetro:

Utilizamos el refractómetro para analizar la calidad y concentración de líquidos como el refrigerante. Este dato no solo nos indica si el sistema está protegido contra temperaturas extremas, sino que también refleja el nivel de mantenimiento que ha recibido el vehículo a lo largo de su vida. Un líquido en mal estado puede evidenciar descuidos importantes por parte de anteriores propietarios.